Colombia es Reparación y Sacrificio
«Oh, Amantísimo Corazón de Jesús, vengo ante Ti , con el peso de mis pecados, a suplicarte e implorarte que tengas compasión y misericordia de mí y de mi familia, de Bogotá (Santafé), de Colombia y del mundo entero.
Acudo a Ti porque eres mi refugio, mi esperanza; el remedio de todos mis malestares, el alivio de mis miserias, la reparación de todas mis faltas, la seguridad de todas mis peticiones, la fuente inagotable para mí y para todos, la luz, fuerza, constancia, paz y bendición.
Me consagro voluntariamente a tu Amadísimo Corazón y te consagro voluntariamente mi familia, mi nación y todas las naciones de la tierra. Protégenos oh Amado Corazón de Jesús y protege mi nación y al mundo entero, de los ataques, trampas y asechanzas del maligno y sus agentes del mal, Sagrado Corazón de Jesús en vos confío. Amen»
Consagración al Sagrado Corazón de Jesús
«Un momento después Jesús me dijo: Niña Mía, durante el sacrificio, únete estrechamente Conmigo y ofrece al Padre Celestial Mi Sangre y Mis Llagas como propiciación por los pecados de esta ciudad. Repítelo ininterrumpidamente durante toda la Santa Misa. Hazlo durante siete días. Al séptimo día vi a Jesús en una nube clara y me puse a pedir que Jesús mirara aquella ciudad y todo nuestro país. Jesús miró con bondad. Al ver la benevolencia de Jesús empecé a rogarle por la bendición. De repente Jesús dijo: Por ti bendigo al país entero. Y con la mano hizo una gran señal de la Cruz encima de nuestra Patria «
Numeral 39, Diario de Sor Faustina Kowalska
Que el pecador no tenga miedo de acercarse a Mi, Me queman las llamas de la misericordia, deseo derramarlas sobre las almas humanas.
Numeral 50, Diario de Sor Faustina Kowalska
Me queman las llamas de la misericordia, deseo derramarlas sobre las almas de los hombres. Oh, qué dolor Me dan cuando no quieren aceptarlas.
Numeral 1074, Diario de Sor Faustina Kowalska